Cuidado con la viuda negra

Dentro de unos meses se estrenará la tercera parte de Spiderman pero la historia que os voy a contar no forma parte de la campaña de promociòn de la película sino de un hecho verídico que le ha sucedido a un amigo hace unos dias.

Hace dos semanas llamé a Jota, un amigo, y me dijo que se sentía mal y que se iba a la cama porque había pillado un trancazo. Lo último que podía imaginarse es que le había picado una de las arañas mas peligrosas que existen en el mundo y mucho menos que le había picado andando por Madrid.

Cuando le llamé al dia siguiente, Jota me dijo que se sentía mal y que el brazo se le había hinchado, que tenía fiebre y que le dolía el cuerpo. Lo del brazo fue casi lo peor porque poco a poco se le había ido poniendo rojo, le dolía como si le clavaran miles de alfileres y se estaba empezando a poner morado. El dermatólogo de urgencia no le prestó casi atención. Lo achacó a una reacción alergica y le mandó un antibiótico y un antinflamatorio.

Jota se fue poniendo peor y peor. No había nada que lograra calmarle el dolor del brazo, que ya se estaba necrosando, y cuando hablaba conmigo se le oía mal, nada que ver con alguien que hubiera pillado un trancazo. Pero si no era un constipado ¿ que otra cosa podía ser?. El dermatólogo le había restado importancia pero los medicamentos que le había mandado no habían mejorado su estado de salud que empeoraba dia a dia. El brazo le dolía a morir.

Después del fin de semana visitó a otro dermatólogo que le dijo que si la enorme ampolla negruzca no se terminaba por abrir se la tendrían que sajar en el quirófano, y el miercoles cuando hablé con el de nuevo me dijo que se había ido al hospital y que el cirujano no tardó un minuto en decidir que tenían que abrir y limpiarle aquello.

Le tuvieron que anestesiar con epidural y la intervención fue de tal calibre que probablemente necesite cirujía reparadora para reconstruir el enorme boquete que le han dejado a causa de la necrosis. Al día siguiente me mandó un mensaje al movil con el resultado de la biopsia: el veneno encontrado correspondía al una viuda negra. Después de esa intervención en el brazó todavía le han tenido que hacer otra mas para limpiarle los restos de tejido muerto y evitar reinfecciones y no queda descartado que le tengan que volver a abrir de nuevo.

Nadie puede creerse la historia. Nisiquiera aunque le hubiera sucedido caminando por las calles de chueca parece razonable que a alguien le pueda picar una viuda negra en una ciudad como Madrid. Mucho menos cuando se trata de una especie de arácnido que no existe en el ecosistema español. Jota ha tenído suerte de ser un tio fuerte y de que, después de dos semanas de sufrimiento, el cirujano, decidiera abrirle y limpiarle la ampolla, pero si la viuda negra sigue por ahí, y está viva, es posible que vuelva a picar. Si eso os sucede no dejeis de poneros hielo inmediatamente y mandar a tomar por culo al dermatólogo si os dice que es una simple reacción alergíca.